Perteneciente al linaje de los Aponte, familia asentada en esta Villa desde el siglo XVI; en 1699 se concede el Marquesado de Torreorgaz a don Diego de Aponte y Zúñiga, Topete y Aldana, Regidor Perpetuo y Caballero de la Orden de Alcántara.

Presenta una fábrica de mampostería de pizarra y sillería de granito de buena escuadra tanto en portada como en las esquinas. En una de ellas, destaca una ventana en ángulo con dos arcos polilobulados, que contrasta con la ventana esquinera de sabor popular del edificio colindante. En su cubierta sobresalen dos airosas chimeneas tradicionales del caserío alcantarino tanto en edificios populares como palaciegos.

Por último resaltar los escudos heráldicos de las familias Aldana, Zúñiga, Rocha, Ovando y Aponte, este último en campo de azur un puente con su arco central quebrado, sobre el que un lobo porta en la boca una cinta con la leyenda "Oh, qué mal paso".

{phocagallery view=category|categoryid=3|imageid=165} {phocagallery view=category|categoryid=3|imageid=62} {phocagallery view=category|categoryid=3|imageid=63} {phocagallery view=category|categoryid=3|imageid=114}